Estela de Carlotto pidió que el Papa Francisco reciba a las Abuelas
Diario La Capital - 26/03/2013
Estela de Carlotto
"Nunca habló de nuestros desaparecidos ni de los nietos que estamos buscando", advirtió la dirigente de derechos humanos. "Cuando venga a Argentina, o antes, podemos viajar, conversar y darnos la mano que nunca nos dimos", anticipó.
La titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela Carlotto, afirmó ayer que el Papa Francisco "nunca habló de nuestros desaparecidos ni de los nietos que estamos buscando", y expresó su deseo de que el Pontífice argentino las reciba próximamente y "haga un gesto" en favor de su trabajo en la búsqueda de los nietos apropiados durante la dictadura cívico militar.
"Siempre tuvimos ganas de hablar con él. Esperábamos que nos convocara como máximo exponente de nuestra Iglesia en Argentina. Pero nunca nos llamó, y lo digo con dolor, y para que se revierta, no para condenar. Nunca habló de nuestros desaparecidos ni de los nietos que estamos buscando", dijo Carlotto en declaraciones a radio Del Plata. Carlotto consideró que si durante la dictadura Bergoglio cometió "un delito o un error", debe hacer un "mea culpa". En ese sentido, la titular de Abuelas expresó su deseo de que "cuando el Papa venga a la Argentina o antes, podemos viajar, conversar y darnos la mano que nunca nos dimos".
"Tenemos confianza en él. Le deseamos lo mejor, que el Espíritu Santo lo ilumine y sea el Papa que espera el mundo, y esperamos también que haga un gesto por este tema y esperamos ser recibidas por él", agregó. En ese sentido, señaló que desde las Abuelas "no cambiamos nuestro discurso según la ocasión" y destacó que Jorge Bergoglio "es argentino, lo cual nos da una inmensa satisfacción, nos pone contentas, ya que es bueno para Argentina y para Latinoamérica que sea Papa un hombre que vivió, sufrió y fue feliz en esta tierra, porque va a saber lo que necesitamos desde la Iglesia".
Sobre el acto de anteayer, en repudio de un nuevo aniversario del golpe de Estado de 1976, Carlotto destacó la presencia de "tantos jóvenes y familias", del ex juez español Baltasar Garzón "que marchó a la par de todos" y, en especial, remarcó la presencia de magistrados y representantes de la Justicia "junto a quienes estamos tratando de modificar la constitución del Poder Judicial". En ese marco, dijo que "hay gente dentro del Poder Judicial que todavía responde a ese pasado terrorífico, demora causas y pone trabas para que las cosas no se resuelvan en tiempo y forma". Carlotto indicó que esas personas "han sido cómplices, negando hábeas corpus, archivando causas, condenando y apropiándose de nuestros nietos, porque hubo jueces que los entregaron sabiendo que sus familias los estaban buscando".
En tanto, la referente de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora Nora Cortiñas consideró ayer que el Papa Francisco "no cumplió el rol que tenía que cumplir ante el horror" que tuvo lugar durante la última dictadura cívico militar del país. "(Jorge) Bergoglio ocultó y dejó de decir cosas que su investidura lo obligaban a decir. No cumplió el rol que tenía que cumplir ante el horror que vivimos", enfatizó Cortiñas.
Además, la dirigente señaló en declaraciones a la radio La Red que "en ningún momento" el actual Papa reclamó "que se deje de humillar a las poblaciones indígenas" que viven en la Argentina.
"En ningún momento escuché la voz de él" sobre esos temas, subrayó Cortiñas y en ese sentido indicó: "No sé si lo hizo por miedo o miró para otro lado".
La integrante de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora consideró que la nueva función el ex arzobispo de Buenos Aires es "muy política" a nivel mundial. "Este cargo de Papa es muy político", señaló Cortiñas, quien consideró que en El Vaticano "esta vez se votó de una manera que no se había hecho nunca". "Es un cargo político que le dieron, quizás quisieron favorecer la imagen de Argentina en un proceso que estamos con avances, con cambios", puntualizó.
Tras la designación de Bergoglio como Papa, otros referentes de derechos humanos del país también se expresaron sobre las acciones del ex arzobispo durante la dictadura cívico militar, con distintos matices. El premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez, quien fue recibido la semana pasada por el Papa Francisco en El Vaticano, descartó que el Pontífice argentino haya sido cómplice de la dictadura y dijo que "no tuvo nada que ver" con lo ocurrido durante esa época.