Adiós a León
León Ferrari construyó una obra singular en la que los campos de la ética, la estética y la política logran dialogar y a la vez tensar sus puntos más extremos de gravedad. Podríamos asegurar que desde aquél Cristo crucificado sobre el fuselaje de un avión que buscaba denunciar los crímenes imperiales sobre Vietnam hasta sus últimas producciones, no menos audaces y provocativas, mantuvo una coherencia sostenida en la búsqueda y en la reflexión permanente sobre su propio hacer.
León FerrariHacia comienzos del año 2004 el propio artista en su taller de Retiro, donó una serie de collages dedicados a ilustrar las entregas del Nunca Más. Serie visual que fue expuesta en la sede provisoria de nuestro Museo y que más tarde itineró por diferentes ciudades de la Provincia.
En el año 2012, el Museo de la Memoria, ya instalado en su sede definitiva, acogió Jaula con aves una obra en la que se ponen en cuestión las relaciones entre arte, política, memoria y mercado. Luego de esa exhibición, una copia de una obra “producida” por esos pájaros – sobre una reproducción de una escena del Juicio Final- fue donada a nuestro Museo por el propio artista a través de las autoridades del MACRO-Castagnino.
A lo largo de todos estos años, su producción se volvió referencial para tantos investigadores que pasaron por nuestra biblioteca, y su obra fue citada y resignificada en tantos seminarios y encuentros dedicados a pensar nuestro pasado reciente.
A su labor artística, León Ferrari le sumó su lucha por la denuncia de los crímenes cometidos por la última dictadura. Su propia vida estuvo marcada por la violencia del Estado, algo que quedó inscripto en su memoria y en su hacer cotidiano y de manera tan evidente en buena parte de su obra.
Por todo esto y mucho más, en este jueves de finales de julio, ante la noticia de su muerte, el Museo de la Memoria le rinde tributo a este hombre generoso, a este luchador incansable y a este artista genial.
¡Gracias León por tu legado!
Equipo de trabajo del Museo de la Memoria de Rosario