Perú comienza las exhumaciones de la etnia que arrasó Sendero Luminoso
El País - 13/06/14
Imagen de archivo de una fosa de víctimas en Perú. / REUTERSPor Jacqueline Fowks
Durante dos meses de trabajo en la selva central del departamento de Junín, un equipo de forenses del Instituto de Medicina Legal de Perú recogió testimonios que apuntaban la posibilidad de localizar restos de entre 120 a 160 personas asháninkas, la etnia amazónica arrasada por el grupo terrorista Sendero Luminoso durante los violentos años de 1980 a 2000. Sin embargo, en los lugares indicados, dos de ellos excampamentos de los subversivos, de momento solo se hallaron los restos de un individuo. Se trata de la primera exhumación de víctimas asháninkas, aunque Sendero Luminoso asesinó a unas 6.000, según el informe final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación.
El antropólogo Iván Rivasplata, jefe del equipo forense del Instituto de Medicina Legal de Perú, indicó a EL PAÍS que las diligencias realizadas entre abril y junio en San Martín de Pangoa responden a un pedido de la 3ra. Fiscalía Penal de Huancayo (Junín). La población asháninka fue sometida a esclavitud, trabajos forzados y servidumbre sexual por parte de los subversivos, en particular en la década de los años 90. “Fuimos a dos sitios de entierro individual y cinco lugares potenciales de entierro colectivo, uno o dos de estos fueron campamentos de Sendero Luminoso, pero en estos últimos no encontramos nada”, asegura por teléfono.
Según Rivasplata, llegaron a los lugares acompañados por nativos que conocen el territorio: “El bosque húmedo tropical cambia radicalmente en 20 años y muchas veces se equivocan”. Sin embargo, si dicha fiscalía u otra les solicita una nueva diligencia, volverán a la zona ashaninka, ubicada en la provincia de Satipo en Junín. En las diligencias en Yaynapango, caserío de la comunidad nativa de Mapotoa, recogieron testimonios de los pobladores que indicaban la supuesta cantidad de muertos en cada lugar, y sumaban de 120 a 160 personas. También recogieron muestras de ADN.
El jefe del Instituto de Medicina Legal desmintió el supuesto hallazgo de una fosa con los restos de 800 indígenas ashaninkas “No sé si uno de esos excampamentos es Saigón, el lugar que algunos concejales de la zona indican que es la fosa, pero no vimos nada. Entre ayer y hoy solo hay reportes noticiosos de personas naturales que aluden a esos lugares de entierro, e incluso dicen que las van a manipular, pero si las conocen deben reportar las coordenadas y hacer la denuncia de la existencia de fosas”, añadió.
En 20 años de violencia, en Perú hubo casi 70.000 víctimas, de acuerdo a cálculos de la Comisión de la Verdad y Reconciliación. El Ministerio Público, encargado de realizar las exhumaciones, estima que hay unos 16.000 desaparecidos en ese período. El Instituto de Medicina Legal ha exhumado 3.000 restos a la fecha. Sin embargo, ese conflicto aún no termina, en particular en el valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro, zona de acción de Sendero Luminoso y, por lo tanto, del Ejército.
El valle abarca parte de los departamentos de Junín, Huancavelica, Ayacucho y Cusco. Allí, varios distritos permanecen hace décadas en continuo estado de emergencia, e incluso, las operaciones antisubversivas han causado víctimas civiles en los dos últimos años, niños y adultos ajenos al grupo terrorista. El último informe de la Oficina de Naciones Unidas para la Droga y el Delito (UNODC) sobre cultivo de coca en Perú indica, además, que ese valle concentra el 57% de la producción nacional del principal insumo para estupefacientes.
Un reportaje de Associated Press destacó que el equipo de forenses realizó las diligencias en busca de víctimas ashaninkas acompañado de miembros del Ejército, por la presencia no solo de Sendero Luminoso, sino también de narcotraficantes en el lugar.