Causa Hospital Militar: Costanzo dio pistas sobre el hijo de Raquel Negro

El represor Eduardo Tucu Costanzo declaró ayer en el juicio que investiga el robo de los mellizos de Raquel Negro, nacidos en cautiverio en el Hospital Militar de Paraná, y apuntó que el bebé varón y hermano de la nieta recuperada Sabrina Gullino podría haber sido apropiado por el militar Paul Navone.

Eduardo Rodolfo Costanzo, ex agente civil de inteligencia.

Diario La Capital - 22/09/2011

El ex personal civil de inteligencia del Ejército, condenado en la causa Guerrieri en 2009 por crímenes de lesa humanidad en la zona de Rosario, dejó entrever que Navone podría haber sido el apropiador del mellizo, hermano de Sabrina.

En su testimonio ratificó sus anteriores declaraciones acerca de que la detenida-desaparecida Raquel Negro, que estuvo apresada en el centro clandestino de detención Quinta Funes, fue trasladada embarazada al Hospital Militar de la capital entrerriana e involucró a cinco de los seis imputados con la sustracción de los hijos mellizos que nacieron en aquella oportunidad.

Además pidió al Tribunal que investigue si Navone, un militar que se suicidó en Córdoba en febrero de 2008 el mismo día que debía prestar declaración indagatoria en la causa, se quedó con el bebé varón.

En un momento de la declaración, se dirigió a los hijos de Raquel Negro: "Les digo a Sabrina y a Sebastián: mírenle bien el rostro a Marino González (uno de los imputados), porque él es el último que tocó a su madre, porque era quien tiraba la gente de los aviones", en los vuelos de la muerte.

Luego agregó: "Háganle un ADN al hijo de Navone, que el día que se mató lo mandaron a España, y al hijo del hermano de Navone, que vive en Casilda, porque siempre se comentaba que tenía un hijo de desaparecidos, o él o el hermano", dejando entrever que podría tratarse de los apropiadores del mellizo, hermano de Sabrina, quien recuperó su identidad hace casi tres años.

"Hace un año y medio que vengo luchando para que este atorrante del juez (federal de Rosario, Marcelo) Bailaque le tome declaración a Carlos Razetti, que tiene todo para decir de quiénes mataron a Raquel Negro y quién tiene el mellizo", dijo el ex servicio de inteligencia. Razetti es hijo del dirigente justicialista asesinado por la Triple A en octubre de 1973, Constantino Razetti.

Costanzo, además dijo que "hay un periodista que vive Barcelona, Oscar Copaitich, que viene dando alaridos, diciendo quiénes mataron a Raquel Negro y quiénes tienen al hijo". Según indicó, este periodista "se crió con Navone en Casilda", donde "se comentaba que tenían un hijo de desaparecidos, él o el hermano".

Por otra parte, ratificó lo que había expresado en otras oportunidades, acerca de que una noche, en el centro clandestino de detención La Intermedia, una quinta en La Ribera propiedad de la familia de Daniel Amelong (otro de los imputados), vio llegar a personas desconocidas en un Peugeot 504. Esos hombres se bajaron, abrieron el baúl y ahí pudo ver el cadáver de Raquel Negro, totalmente desnuda, atada y con una bolsa en la cabeza. "La sacaron y la llevaron con los otros muertos al camión, para llevarlos al aeropuerto y tirarlos al mar", aseveró.

Fariña se enojó. El ex militar Jorge Fariña, sentado en el banquillo, pidió ampliar su indagatoria ante el Tribunal Oral Federal, previo al testimonio de Eduardo Costanzo. Dijo que Costanzo tiene "animosidad" contra él, que es un "fabulador, mentiroso, mitómamo, estafador, un personaje perverso" y que "a él (por Costanzo) se le cree todo y a mí no se me cree nada, que soy todo lo contrario y reconocido en todas las ciudades donde estuve. Soy una persona de bien".

Luego añadió: "Creo que la investigación debe dirigirse y profundizarse principalmente sobre Costanzo y Navone, y sobre el IPP (Instituto Privado de Pediatría). Yo no tengo absolutamente nada que ver, ojalá se llegue a buen término y ojalá se sepa qué es lo que sucedió con los mellizos de la señora Raquel Negro".

Fariña se sumó así a otro imputado, el ex teniente coronel Pascual Oscar Guerrieri, en el planteo que hizo días pasados de que Costanzo y Navone tenían una relación personal, pretendiendo involucrar a ambos con el caso investigado.

En la causa Hospital Militar, que juzga a los represores Amelong, Walter Pagano, Marino González, Jorge Fariña, Pascual Guerrieri y Juan Antonio Zaccaría, el Tribuna Oral Federal investiga la sustracción y sustitución de identidad de los hijos de Raquel Negro y Tulio Valenzuela, quien dio a luz a mellizos en el nosocomio castrense en 1978.

Uno de sus hijos, Sabrina Gullino, recuperó su identidad en 2008, gracias, entre otros datos, al relato del propio Costanzo, quien dijo de qué modo se realizó el operativo de traslado de Negro y el destino de su hija recién nacida, quien fue abandonada en un convento de Rosario. El hermano mellizo de Sabrina continúa siendo buscado.

La Fiscalía continuó con su alegato contra Díaz Bessone

El fiscal federal de Rosario Mario Gambacorta continuó ayer detallando casos de secuestros, torturas y desapariciones ocurridas en el Servicio de Informaciones de la Policía durante la última dictadura, en el marco del alegato del Ministerio Público por la causa que juzga al ex jefe del II Cuerpo de Ejército Ramón Díaz Bessone y otros cinco represores por crímenes de lesa humanidad.

"Relató con detalles cada caso, manifestando las condiciones de cada secuestro, los tormentos a que cada víctima fue sometida y su destino final”, dijo la abogada querellante Jésica Pellegrini al término de la audiencia de ayer en el Tribunal Oral Federal 2 de Rosario. La abogada añadió que, entre el público que asistió a la audiencia, “varios sobrevivientes y familiares de desaparecidos escucharon conmovidos el relato de cada uno de sus casos, exhibiendo las fotos de los compañeros desaparecidos”.

Sólo tres de los seis imputados: el civil Ricardo Chomicky y los ex policías Ramón Vergara y Mario Marcote, estuvieron presentes en la sala, mientras que el ex militar, y los ex policías José Lo Fiego y José Scortechini no asistieron a la audiencia.

En la etapa final del juicio, destinada a los alegatos, el fiscal Gambacorta realizó un resumen de algunos de los testimonios brindados a lo largo de más de un año y las informaciones recogidas para la acusación del Ministerio Público. A lo largo de las últimas semanas, ya realizaron los alegatos las querellas particulares y la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, quienes pidieron distintos tipos de condenas para los acusados en el juicio, imputados por crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura en el centro clandestino de detenciones que funcionó en el Servicio de Informaciones de la policía local.

La abogada Pellegrini resaltó que “lo inenarrable de los tormentos tiñó de silencio y tensó a la sala ante el relato circunstanciado de la suerte seguida por Ana María Moro, Hugo Cheroni, Juan Alberto Fernández, Nora María del Huerto Díaz, Eduardo Nasini y Ester Bernal”, entre otras víctimas del terrorismo de Estado. Pellegrini destacó que José Esteban Fernández, Eduardo Nasini, Gregorio Larrosa y María de las Mercedes Sanfilippo fueron sobrevivientes del Servicio de Informaciones que se encuentran fallecidos.

“Esta es una muestra más de las consecuencias de los más de 30 años de impunidad que impidieron a muchos de los sobrevivientes ver a sus verdugos siendo enjuiciados”, dijo la abogada tras la audiencia. El proceso continuará el próximo lunes cuando la Fiscalía retome su alegato.

Atrapado

El ex oficial de la Armada Francisco Di Paola, que integró el grupo de tareas de la Esma bajo el seudónimo de “Chino” y estaba prófugo desde 2008, fue detenido ayer en Neuquén. La orden de captura había sido librada por el juez federal Sergio Torres, y el represor fue capturado por personal de la Policía Federal.

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