Un represor condenado vinculó a Andrada con los secuestros en el bar Magnum

El ex personal civil de Inteligencia del Ejército Eduardo Tucu Costanzo reafirmó ayer que el ex arquero canalla Edgardo Gato Andrada fue parte de la patota que secuestró a los militantes peronistas Osvaldo Cambiaso y Eduardo Pereyra Rossi. Dijo que el ex futbolista "era muy apegado a (el jefe militar Pascual) Guerrieri, que lo hizo ingresar" en el Destacamento de Inteligencia, y que "figura en los archivos del Ejército con el apellido falso de Antelo".

Diario La Capital - 03/11/2011

En diálogo con el programa "Trascendental", de radio La Ocho, Costanzo, condenado por crímenes de lesa humanidad en la causa Guerrieri-Amelong, y que actualmente cumple arrresto domiciliario, explicó que al momento del secuestro, perpetrado el 14 de mayo de 1983, estaba en Tucumán, pero de regreso en Rosario miembros de la patota le contaron lo sucedido. Además, dijo que "el chofer del Destacamento, un muchachito al que le decían Chope, que yo dejé todos sus datos en el Juzgado para que lo llamen a declarar, me contó todo con lujo de detalles porque estaba parado en el Falcon amarillo, legal, del Destacamento, con Guerrieri y el (teniente coronel Víctor) Chuli Rodríguez en la puerta del bar Magnum" donde se hizo el operativo.

Consultado sobre el rol que jugó el Gato Andrada en el operativo, Costanzo enfatizó que "era un agente de la patota y estuvo en el secuestro". En cuanto a la participación del ex arquero en otros hechos, apuntó que "no iba a ser figurita decorativa, ahí trabajaban todos, no cabe ninguna duda. Andrada figura en los documentos con el nombre trucho de Antelo. En todas las que se hizo estuvo él, porque era muy pegado a Guerrieri por el fútbol, por eso lo nombra agente de inteligencia, lo nombra Guerrieri".

Relató que "a Pereyra Rossi y a Cambiasso los esperaban en la Terminal de Omnibus y no llegaron allí, parece que se bajaron antes, entonces cuando volvían todos ya sin haberlos encontrado, viene por Ovidio Lagos un agente de inteligencia, Daniel Fabi, y los ve a los dos entrar al bar, entonces lo llama por radio a Guerrieri y bajan todos al bar Magnum".

Dijo que "los llevaron en el camioncito 608, el Merceditos que tenían para llevar los muertos al avión, y los llevaron a Circunvalación al fondo, donde hoy está más o menos el súper Libertad, pero que en ese momento cuando estaban haciendo la Circunvalación, por Oroño ese tránsito estaba cortado". Añadió que "ahí los pusieron en el camioncito y los tuvieron todo el día dándole máquina —en alusión a la tortura con picana eléctrica—, y a la noche los llevaron a entregárselos a (el ex policía Luis) Patti".

El Tucu describió que "en el auto que llevaban a Cambiaso, lo tenían en el asiento de atrás e iba el Puma (Ariel) Porra pisándole la espalda y la cabeza", mientras que "en el otro auto que lo llevaban a Pereyra Rossi iban (alias) Filtro o sea Sebastián, que era el yerno del coronel (Juvenal) Pozzi pisándole la cabeza. Ellos se los entregaron a Patti que después hace creer que fue un enfrentamiento" la causa de muerte.

Consultado sobre la razón del secuestro de los militantes peronistas en el epílogo de la dictadura, Costanzo conjetura que fue "locura de Guerrieri de eliminarlos porque prácticamente ya estaba encima la democracia. El taradito este y el Chuli Rodríguez, que es un teniente coronel que sale siempre en los diarios y en la televisión porque es presidente de esa comisión sanmartiniana que hace el cruce de Los Andes, a lo mejor se lo quiere encontrar a San Martín para enseñarle cómo se secuestra gente", ironizó.

El represor arrepentido, que aportó importantes datos sobre el terrorismo de Estado en la zona, criticó al juez federal de San Nicolás Carlos Villafuerte Ruzo por no citar a declarar a "Raúl Campilongo, porque en el juzgado le dije al juez que Campilongo estaba parado en la vereda, en la puerta del Magnum con la pistola en la mano y no dejando pasar a nadie". Explicó que "Campilongo es un hombre que era del estudio de Cerutti, fue director de Vivienda de Rosario en el año 84 u 85, y lo nombraron cuando (el represor Jorge) Fariña se va a Misiones de jefe del Destacamento se lo lleva a allá, que después lo adscribe junto con (el también represor Juan Carlos) Bossi, ese que mató como a 70 inyectándolos y todavía el juez (de Rosario Marcelo) Bailaque no lo ha citado, ni lo citará, anda caminando por la peatonal". Costanzo también atribuyó esta actitud del juez a que es cuñado del general Enrique Bonifacino, y a que "Chuli Rodríguez fue jefe del Destacamento de Inteligencia de San Nicolás. Está clarito, se conoce perfectamente bien con el juez Villafuerte Ruzo".

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