Menéndez sumó su séptima condena a cadena perpetua
La Justicia federal de Salta condenó a prisión perpetua a Luciano Benjamín Menéndez y a Joaquín Guil, al dictar sentencia en el juicio de Palomitas II, por el fusilamiento de 11 presos políticos salteños.
Diario La Capital - 07/12/2011
De esta manera, Menéndez, batió su propio récord de condenas por crímenes de lesa humanidad tras haber recibido ayer su séptima sentencia de cadena perpetua.
El juez Julio Bavio condenó a Menéndez a la pena de reclusión perpetua e inhabilitación absoluta, por encontrarlo responsable penalmente del delito de homicidio doblemente calificado por alevosía y con el concurso premeditado de dos o más personas, en once hechos en concurso real. También condenó a Guil, que era el jefe de Seguridad de la Policía de Salta en 1976. Ambos fueron juzgados por la muerte de 11 presos políticos ocurrida el 6 de julio de 1976, en el paraje Palomitas, a unos 50 km de Salta capital, donde fueron acribillados cuando eran supuestamente trasladados desde el penal salteño de Villa Las Rosas hacia una cárcel de Córdoba.
A la vez, el ex agente del Servicio Penitenciario Juan Carlos Alzugaray fue condenado a 20 años de reclusión. El magistrado también revocó la prisión domiciliaria a Guil y ordenó que cumpla su detención en forma efectiva, en una cárcel perteneciente al Servicio Penitenciario Federal, por lo que fue trasladado al nuevo penal de General Güemes.
Identificaciones
Los restos de los hermanos Armando, Edgardo y Dardo Torres fueron identificados por la Justicia. Eran delegados gremiales de Química Mebomar, en Esteban Echeverría, y fueron secuestrados en diciembre de 1976. Sus cuerpos aparecieron fusilados en vísperas de Navidad, en Banfield, y fueron inhumados como NN en el cementerio de Lomas de Zamora.