Con todos los acusados tras las rejas
El primer juicio por delitos de lesa humanidad en Tandil comenzó con la causa conocida como “Moreno”. Cinco acusados, dos civiles y tres militares, empezaron a ser juzgados por el secuestro y asesinato de Carlos Alberto Moreno, militante de la Juventud Peronista de Olavarría y abogado laboralista de la Asociación de Obreros Mineros Argentinos (AOMA). Tras la primera jornada, todos los imputados quedaron detenidos en cárcel común.
Diario Página/12 - 13/02/2012
El 29 de abril de 1977 Moreno fue secuestrado y llevado a la Chacra de Méndez, propiedad de los hermanos Emilio y Julio Méndez, en Tandil. El 3 de mayo logró escapar, pero fue recapturado y asesinado. Como abogado estaba investigando las malas condiciones de trabajo en la empresa Loma Negra. La cementera, que por entonces era propiedad de Amalia Fortabat, fue una de las tantas empresas que se beneficiaron económicamente bajo la dictadura y se sospecha que sus autoridades tuvieron responsabilidad en la represión y persecución de sus trabajadores.
En el proceso oral que comenzó el jueves pasado, los dos civiles acusados, los hermanos Méndez, llegaron al juicio excarcelados y se fueron detenidos a una cárcel común. Además, en sintonía con la decisión del Tribunal Oral Federal (TOF) para que el juicio se desarrolle en la ciudad donde Carlos Alberto Moreno estuvo secuestrado y fue asesinado, los jueces Néstor Rubén Parra, Roberto Atilio Falcone y Mario Alberto Portela resolvieron que todos los imputados continúen el juicio detenidos en cárcel común, por lo que también revocaron el beneficio del arresto domiciliario para el mayor Roque Italo Pappalardo y el teniente coronel Julio Alberto Tomassi. El quinto represor, el ex suboficial José Luis Ojeda, ya estaba cumpliendo prisión preventiva en una unidad penal.
Mientras se realizaba la audiencia en el aula magna de la Universidad Nacional del Centro, frente a la plaza Independencia de Tandil, en la calle se manifestaban militantes de organismos de derechos humanos y de agrupaciones políticas, además de los vecinos y vecinas que se acercan a apoyar o preguntar. El momento más emotivo fue cuando salió Taty Almeida, madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, y todos cantaron: “Madres de la Plaza: el pueblo las abraza”.
La primera jornada del juicio oral concluyó con el traslado de los represores y con un acto en la calle, incluido un recital con la Bersuit Vergarabat. Estaban los hijos de Carlos Alberto Moreno, Matías y Martín, militantes de Hijos. El segundo, el más joven de los dos, estaba en la panza de su mamá cuando su padre fue secuestrado, por lo que no llegó a conocerlo. Fue él quien leyó el documento elaborado por la Multisectorial por Memoria, Verdad, Justicia y Alegría. Cuando terminó, los presentes cantaron “como a los nazis les va a pasar: adonde vayan los iremos a buscar”. Hasta ese momento, los civiles Julio y Emilio Méndez caminaban por las calles de Tandil.
El juicio por el secuestro y asesinato de Carlos Alberto Moreno continúa con las audiencias testimoniales los jueves y viernes, desde las 10. Pueden ingresar a las audiencias los mayores de 18 años, acreditándose con su DNI o cédula. Se calcula que el juicio durará entre dos y tres meses. De ser así, se conocería el veredicto a los 35 años del asesinato de Moreno.