Los vericuetos llegaron a su fin
Postergado por razones varias, el juicio comienza este jueves. Acusado por secuestro y torturas a Froilán Aguirre, entonces militante de la Unión de Estudiantes Secundarios, el ex comisario Roberto José Martínez Dorr será enjuiciado por delitos de lesa humanidad en el Tribunal Federal santafesino.
Froilán Aguirre, testigo clave en la causa, y una imagen actual de Martínez Dorr.Diario Rosario12 - 21/02/2012
Por Juan Carlos Tizziani, desde Santa Fe
Este jueves arrancará el cuarto juicio por delitos de lesa humanidad en Santa Fe, que sentará en el banquillo al ex comisario Roberto José Martínez Dorr ("Morrongo"), acusado por el secuestro y torturas a un joven militante de la Unión de Estudiantes Secundarios (UES), Froilán Aguirre, cuando tenía 17 años. El debate se extenderá cuatro semanas --los jueves y viernes--, así que la sentencia podría conocerse el 23 de marzo, en vísperas de que se cumplan 36 años del golpe de 1976. El Tribunal Oral Federal tiene previsto escuchar a 30 testigos, entre ellos a tres represores ya condenados por crímenes del terrorismo de Estado: el ex oficial de inteligencia de la Policía santafesina, Eduardo Ramos; el ex jefe de la comisaría 4ª, Mario José Facino y el dirigente del gremio de la construcción (Uocra) Horacio Barcos, que operó como agente secreto del Ejército (PCI).
En el arranque, Martínez Dorr tendrá la posibilidad de ampliar su indagatoria, a la tarde está previsto que declare Aguirre, y el viernes el Tribunal realizará una inspección ocular a la comisaría 1ª, en el microcentro santafesino, donde Aguirre estuvo secuestrado durante 29 días, en 1976. Martínez Dorr fue detenido hace cuatro años, en febrero de 2008. Estuvo preso 29 meses en el pabellón de represores en la cárcel de Las Flores --junto con Barcos, Ramos y otros--, pero a mediados de 2010 logró el beneficio del arresto domiciliario por un problema de salud, así que desde entonces está en su casa.
El juicio tendría que haberse realizado hace un año. El Tribunal fijó la fecha del 31 de marzo de 2011, pero Martínez Dorr utilizó un artilugio legal: pidió "la suspensión del juicio a prueba" para conmutar una eventual pena de prisión por trabajos sociales. Fue el primer acusado por delitos de lesa humanidad de la Argentina que intentó cambiar días de cárcel por una probation. El Tribunal rechazó el pedido, pero como el imputado apeló el fallo, suspendió el debate y le concedió el recurso ante la Cámara Nacional de Casación Penal, que recién resolvió el incidente en diciembre del año pasado.
El Tribunal rechazó el intento de Martínez de cambiar días de cárcel por trabajos sociales porque "las violaciones a los derechos humanos resultan de tal gravedad social y trascendencia institucional que no pueden ser objeto del beneficio que se pretende", sostuvo el Tribunal. Y agregó: "Los delitos de lesa humanidad son precisamente aquellos en los que más que ningún otro resulta imprescindible que sean sometidos a los principios que impone el debate oral, tales como la contradicción, la inmediación y la oralidad, que otorgan mayores garantías a todas las partes, y la publicidad en el desarrollo del juicio que posibilita a toda la sociedad conocer los hechos, la responsabilidad de quienes participaron en ellos y fundamentalmente el modo en que fue resuelto el conflicto". En diciembre, la Cámara de Casación confirmó el criterio del Tribunal santafesino y habilitó el juicio que comenzará el jueves.
Desde su detención, en febrero de 2008, Martínez Dorr interpuso todos los recursos a su alcance y en 2009 hasta acusó al juez que lo investigaba, con el pretexto de que se había equivocado y que el Martínez que buscaba era otro. El Consejo de la Magistratura desestimó la denuncia contra el juez federal Reinaldo Rodríguez porque no observó "ninguna irregularidad en la actuación del magistrado".
Su víctima también ratificó que no hubo errores en la investigación judicial. "Yo no tengo dudas que (el torturador) es Martínez Dorr", dijo Froilán Aguirre cuando declaró en el juicio al ex juez Víctor Brusa y otros represores, en noviembre de 2009. Froilán fue secuestrado por un grupo de tareas de la dictadura el 8 de setiembre de 1976 en el hospital Iturraspe de Santa Fe, junto con un compañero de militancia, Juan Alberto Osuna ("Beto"), a quien luego escuchó agonizar en el centro clandestino donde los torturaron, en las afueras de San José del Rincón. El cuerpo de Osuna apareció unos días después, el 25 de setiembre de 1976, en Paraná, en un simulacro de enfrentamiento que se conoce como la Masacre de la Tapera.
En noviembre de 2009, Froilán Aguirre declaró como testigo en el juicio al ex juez Víctor Brusa y otros represores y ratificó su acusación a Martínez Dorr. Unos días antes había recibido una carta anónima con una decena de nombres de supuestos integrantes del grupo de tareas que lo secuestró y torturó en el centro clandestino de Rincón, pero en la que no figuraba Morrongo. Aguirre leyó la carta ante los jueces. "Uno de los párrafos niega lo que yo digo, pero yo no tengo dudas", dijo. Y ratificó que fue Martínez Dorr quien lo sometió a una "feroz paliza" en la comisaría 1ª porque había dibujado en la pared una estrella de ocho puntas con sus iniciales, "FA", la fecha de su secuestro, "8/9/76", y una firma: "Montos". "¿Así que sos Monto?", dijo que le preguntaba Morrongo mientras le azotaba la cabeza contra la pared. "Me saltó arriba del cuerpo y con un manojo de llaves me golpeaba en los testículos. Uno de los detenidos que estaba ahí tuvo un ataque de vómitos por la forma en que me habían pegado". Froilán dijo que pudo "reconocer la fisonomía" de su torturador. Lo pudo "reconocer perfectamente". Era Martínez Dorr.