Procesan a connotado miembro de aquellas patotas
El juez Bailaque procesó por terrorismo de Estado al ex comisario Rodolfo Isach. Eduardo Tucu Costanzo lo había señalado en distintas declaraciones, como uno de los que asesinó a los detenidos en la Intermedia. También el ex agente de inteligencia Gustavo Bueno, hoy radicado en Brasil, lo apuntó como miembro de grupos de tareas.
Una borrosa foto de Isach cuando era comisario en la Unidad Regional XVII de San Lorenzo. Imagen: Gentileza periódico Síntesis de San LorenzoDiario Rosario12 - 29/04/2012
Por José Maggi
El represor Rodolfo Daniel Isach, ex comisario de la policía santafesina y ex Personal Civil de Inteligencia durante la última dictadura, fue procesado por el juez federal Marcelo Bailaque por cuarenta y seis casos de privación ilegal de la libertad agravada por mediar violencia y amenazas, otro veintinueve casos de secuestro seguidos de tormentos y veinticinco homicidios. Actuó en los centros clandestinos Quinta de Funes, Escuela Magnasco, la Intermedia, La Calamita y Fabrica Militar de Armas Domingo Matheu.
Eduardo Tucu Costanzo, lo había señalado en distintas declaraciones, como uno los que asesinó a los detenidos en la Intermedia. También el ex agente de inteligencia Gustavo Bueno, radicado hoy en Brasil, también lo apuntó como miembro del grupo de tareas.
Del legajo personal de Isach surge que formó parte como Personal Civil del Destacamento de Inteligencia 121 que fue designado como agente S, en el cuadro C subcuadro C2, In 14 el 1 de diciembre de 1976. Hasta el 22 de diciembre de ese año su destino interno fue la actividad especial de inteligencia y a partir de esa fecha hasta el 30 de setiembre de 1977 pasó a integrar la Sección Operaciones Especiales de Inteligencia. El 15 de diciembre de 1977 presentó su renuncia y el 1 de enero de 1978 se dispuso su cese de funciones.
El que avaló moral e ideológicamente a Isach para el ingreso al destacamento fue el Mayor Alberto Scunio, que utilizaba el seudónimo de Ricardo Infante, aunque el alias bajo el cual actuaba, según entendió el juez Bailaque era el de "Agustín".
Entre algunos de los casos analizados por el juez Bailaque en su dictamen figura el de Juan Carlos Gesualdo secuestrado el 28 de abril del 77 en su casa, Avellaneda 495 de Rosario. Costanzo dijo ante la Justicia que fue llevado a La Calamita, ejecutado y enterrado en las islas frente a Rosario. "El comisario mayor retirado Rodolfo Isach, es quien junto a Ariel López, alias Aldo o el Oreja, y el entonces capitán Juan Carlos López entierra tres personas en la isla... Luego me entero que uno era el hijo de un dentista que vivía al costado del viaducto Avellaneda en una chalet en una esquina"...
Un dato de interés es que la defensa de Isach planteó su excarcelación argumentando que tiene una hija discapacitada. El pedido fue rechazado por al fiscal federal Mabel Colalongo y en primera instancia por el juez Bailaque, y fue elevado la Cámara Federal de Apelaciones de Rosario.
Hay sin embargo un elemento polémico en el dictamen de Bailaque: si bien procesó a Isach por el secuestro de Rubén "Tito" Messiez, le dictó la falta de mérito por sus tormentos. Este punto fue apelado por la fiscal Mabel Colalongo.
En tanto y habida cuenta de los datos de su legajo, Isach también fue beneficiado con una falta de mérito por los hechos ocurridos en Fábrica Militar Domingo Matheu y que tuvieron como víctimas a Ramón Verón, Adriana Arce, Juan Rivero, Olga Moyano, Hilda Cardozo, Susana Miranda, y Ariel Morandi.
El juez Bailaque lo procesó con prisión preventiva entendiendo además que formó parte de una asociación ilícita y le dictó un embargo de 4.850.000 pesos.
El magistrado lo encontró responsable de 46 casos de secuestros que tuvieron como victimas a Adriana Quaranta, Elena Sarnari, Susana Zitta, Francisca Domínguez, María Amelia González, María Luisa Rubinelli, Carlos Novillo, Alejandro Novillo, Carmen Cantalejo, Patricia Coria, Laura Repetti, Eduardo Ferreyra, Viviana Nardoni, Luis Megías, Rafael Bielsa, Mercedes Domínguez, Graciela Zitta, Emma Bunna, Diego Fuhr, Daniel Fuhr, Jaime Dri, Tulio Valenzuela, Guillermo White, Jorge Ruffa, Juan Gesualdo, Rubén Messiez, Alberto Barber Caixal, Hector Larrosa, Ernesto Traverso, Aníbal Morcabel, Rubén Flores, Marta Benassi, Daniel Capella, Fernando Dussex, Ana Gurmendi, Stella Hildbrand de Del Rosso, Carlos Laluf, María Reyna Lloveras, Jorge Novillo, Pedro Retamar, Teresa Soria de Sklate, Eduardo Toniolli, Miguel Tossetti, Marta Forestello, Liliana Nash de Bruzzone, Raquel Negro y Fernando Agüero.
La justicia entendió que Isach era responsable por las torturas a 29 de estas víctimas, veinticinco de las cuales terminaron siendo asesinadas.
Isach había sido capturado la última semana de febrero, en Ostende, un pueblo de la costa atlántica tras ser allanado su domicilio, después de cuatro años de estar prófugo, tras un pedido de captura que concreto un brigada de inteligencia de Gendarmería.
En Rosario, Isach fue indagado por el juez Bailaque y la fiscal Mabel Colalongo, ante quienes solo reconoció que en su paso por la policía santafesina fue destinado a la Brigada de Explosivos, entre otros destinos a San Lorenzo, donde llegó incluso ya en democracia a ser el jefe de la Unidad Regional 17.
El detenido aún está alojado en el penal policial de la Jefatura, en avenida Francia al 5000. Hace solo unos días el propio Eduardo "Tucu" Costanzo, le envió una carta al juez Bailaque, para que decida su traslado a un penal de mayor seguridad habida cuenta del manejo de explosivos que tiene Isach, de la ascendencia que tiene sobre la tropa policial y de la animosidad hacia quienes intervinieron en su detención. Costanzo encabezó la lista con él mismo, y señaló a un hombre de prensa y a una funcionaria federal, entre los objetivos posibles del ex agente de inteligencia, que cambió de hábitat en las últimas semanas.
Mientras el hermano de Rodolfo Isach, Carlos, continúa prófugo en el marco de la causa Guerrieri, cuyo juicio oral ya condenó a prisión perpetua a Oscar Guerrieri, Jorge Fariña, Daniel Amelong, y a los civiles Walter Pagano y Eduardo Costanzo por los crímenes ocurridos en los centros clandestinos de detención Quinta de Funes, La Calamita, La Intermedia, Escuela Magnasco y Ex Fábrica Militar de Armas Domingo Matheu.