A la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación
Texto publicado en la sección Carta de los Lectores del Diario La Capital, de Rosario.
Diario La Capital - 27/05/2011
A la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación.
Con todo el respeto que ustedes nos merecen, con la importancia y la repercusión que tienen en nuestro país y en el mundo los juicios contra el terrorismo de Estado que se están realizando en estos años, queremos pedirles humildemente que también ustedes nos respeten. Todos nosotros hemos pasado por la vivencia de secuestros y torturas, no sólo de nosotros mismos sino también de nuestros seres queridos (madres, padres, esposos/as, hermanos/as, hijos nacidos y por nacer, compañeros, amigos), hemos vivido la incertidumbre de la desaparición, la ignominia y el terror del centro clandestino de detención, el encierro prolongado durante años, la persistente impunidad de nuestros verdugos, las pérdidas definitivas. En las primeras audiencias del juicio oral contra Díaz Bessone, Lofiego, Marcote, Vergara, Scortecchini y Chomicki por detenciones ilegales, tormentos y homicidios, más asociación ilícita, nos enteramos que la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, en su calidad de querellante, había desistido de acusar a Ricardo Chomicki (y a Nilda Folch, Graciela Porta, Carlos Brunatto, quienes inadmisiblemente siguen estando prófugos y quienes, protegidos por el paraguas que ustedes les brindan, lo seguirán estando). Desisten ustedes de una acción inculpatoria interpuesta por ustedes mismos en tiempo y forma (en oportunidad de presentar vuestra "Requisitoria a elevación a juicio oral"). Y para fundamentar vuestro posterior desistimiento (y el inexplicable viraje producido de la noche a la mañana) recurren ustedes a un nefasto documento de la Unidad Fiscal Nacional de 2008. Documento que oportunamente impugnamos con dureza aquellos que nos sentimos aludidos por sus aseveraciones. Además de conminados a pensar-obrar-decir-no hacer- no pensar-no decir lo que unos pocos "expertos" allí dictaminan. Decimos que ese documento, que en mala hora emitiera la Unidad Fiscal, es sencillamente nefasto. Decimos esto por varios motivos, fundamentalmente porque falsea la realidad de lo ocurrido en los campos de concentración de nuestro país. Y porque al hacerlo nos agravia. Agravia a quienes somos sobrevivientes y nos comprometimos desde siempre y a lo largo de décadas en la denuncia de los horrores vividos y en la búsqueda infatigable de verdad y justicia. Y lo que es peor, agravia a nuestros muertos instalando un relato falso y forzando una interpretación postrera de sus actos que está muy lejos de la verdad tal como ésta se perfila en los testimonios de los sobrevivientes. Estimados doctores de la Secretaría de Derechos Humanos: por favor, no nos agredan más.
Militantes Populares detenidos en el Servicio de Informaciones de Rosario en la última dictadura militar.